El Gas Natural Comprimido o GNC es el combustible por el que está apostando SEAT en sus últimos lanzamientos para propulsar algunos de sus modelos más emblemáticos como el León o el Ibiza, identificados por las siglas TGI. El GNC es el mismo gas que usamos en nuestros hogares, pero comprimido a un 1% de su volumen para ofrecer una mayor capacidad de propulsión en nuestros vehículos
La tecnología híbrida TGI funciona combinando dos combustibles: el Gas Natural Comprimido y la Gasolina. Los vehículos que equipan motores TGI utilizan el GNC como combustible principal y cambian a gasolina solo cuando lo necesitan. Al usar dos combustibles, con un depósito de gas 100% fiable y hermético, podrás recorrer más kilómetros sin parar a repostar y con un menor coste por kilómetro, por esto último, el bajo coste en consumo es sin lugar a dudas uno de los factores clave que está llevando al GNC a ser el combustible de moda.
Conducir un coche TGI en modo gas natural te permite ahorrar hasta un 30%* de combustible en comparación con un vehículo diésel, y hasta un 50%* en comparación con un motor a gasolina. Además, el GNC reduce las emisiones de C02 hasta un 25%, mejorando la calidad del aire por lo que obtiene la etiqueta ECO establecida por la Dirección General de Tráfico. Esta consideración se traduce en una serie de ventajas en materia de regulación en periodos de alta contaminación, especialmente cuando se establecen zonas de exclusión, zonas de aparcamiento regulado, además de descuentos en el impuesto de circulación, peajes, etc.
*Porcentaje obtenido al comparar un modelo SEAT con motor TGI mientras se conduce en modo CNG con el mismo modelo SEAT con motor de gasolina o diésel, utilizando datos oficiales y homologados de emisiones de CO2 y consumo medio de combustible.