10 Consejos para viajar en coche con niños

10 Consejos para viajar en coche con niños

Según el último estudio realizado por Child Seat Safety, dos de cada tres pequeños no viajan de forma correcta y segura cuando se desplazan en coche. Además de no usar en todos los casos la silla obligatoria, se han detectado también otros errores que pueden tener graves consecuencias en caso de accidente. Por este motivo, desde SEAT Bellamar hemos elaborado este decálogo con una serie de consejos y normas básicas a seguir para mejorar la seguridad de nuestros pequeños:

1. La sillita, homologada y según altura y peso.
No solo la edad determina qué tipo de sillita se debe usar, también influyen el peso y la estatura. Es importante usar siempre la sillita del grupo adecuado, porque el diseño de cada una responde a unas necesidades específicas de protección del cuerpo de los más pequeños.

SEAT cuenta con sillas de los diferentes grupos, homologadas según la última normativa europea, conocida como i-Size. Hay que tener cuidado, por otro lado, con las sillitas heredadas, de segunda mano, porque tras un largo periodo de tiempo los materiales tienden a deteriorarse y puede que no garanticen la protección original. Tras un accidente, también hay que sustituirlas.

2. Siempre en los asientos traseros.
Es el lugar más seguro del habitáculo y por tanto es dónde siempre deben viajar los niños. Aunque el asiento del copiloto está habilitado para colocar sistemas de retención infantil, sólo está recomendado usarlo en ocasiones muy excepcionales, por ejemplo, cuando los de atrás ya están ocupados por otras criaturas. En estos casos, hay que desconectar siempre el airbag.

3. Asegurar el correcto anclaje.
Es importante leer detenidamente las instrucciones de la silla para instalarla correctamente y, después comprobar en cada viaje que está bien fijada. El método más sencillo y cómodo es el Isofix. Si el modo de anclaje es mediante el cinturón de seguridad, debemos cerciorarnos de que pasamos correctamente la cinta por los puntos que indica el fabricante.

4. El arnés bien tensado.
A menudo los pequeños lo llevan demasiado holgado, con lo que hasta pueden sacar los brazos, algo que podría tener graves consecuencias en caso de colisión. Los arneses deben ir tensados y lo más ajustados posible a su cuerpo. Un truco es intentar pellizcar la cinta. Si se puede, se deben ajustar un poco más.

5. A contramarcha el máximo tiempo posible.
En caso de colisión frontal, el cuello de un bebé no está preparado para soportar el peso de su cabeza impulsada hacia delante, por eso las sillas de los grupos 0 y 0+ están diseñadas para colocarse sólo a contramarcha. Es obligatorio alargar esta posición como mínimo hasta los 15 meses, y es posible hasta los 1,05 metros de altura, según lo prescrito por la normativa ECE R129.

6. No descuidar los trayectos cortos.
Los desplazamientos de casa al colegio acumulan el mayor número de conductas de riesgo. Según el RACE, el 37% de los conductores reconoce haberlos llevado en alguna ocasión sin sillita. Otros dejan que los más mayores se abrochen solos, sin comprobar si lo han hecho correctamente.

7. Abrigos y mochilas fuera.
En los viajes de pocos minutos, a menudo se deja a los pequeños con el abrigo puesto o incluso con la mochila escolar a la espalda. Son elementos que aumentan la holgura entre el cinturón y el cuerpo del niño, y pueden dificultar el buen funcionamiento del arnés. Y aunque sea para pocos kilómetros, nunca se debe olvidar que la seguridad es clave desde el primer metro.

8. Todo al maletero.
Equipaje y objetos en los asientos o en la bandeja trasera pueden convertirse en proyectiles en caso de un frenazo o colisión.

9. Predicar con el ejemplo.
La coherencia entre lo que se dice y lo que se hace es un requisito indispensable para la educación, también en seguridad vial. El cinturón es obligatorio para todos y los niños imitarán la conducta de los padres, porque el ejemplo vale más que mil palabras.

10. En caso de accidente.
Siempre que sea posible, hay que sacar a los pequeños de un coche siniestrado en su silla. Salvo riesgos inminentes, nunca hacerlo en brazos ya que se les podría provocar una lesión grave.